Después de ver estos interiores me da la sensación de entrar en un estado de absoluta paz. Para Gilles & Boissier conseguir esta aparente simplicidad requirió un respeto por la arquitectura de este viejo caserío vasco-francés. Bien es verdad que ellos son maestros de la sencillez... ese tipo de austeridad lujosa donde el valor está en el cuidado con que está elegido cada acabado haciéndolo exclusivo.
After seeing these interiors I have the feeling of entering in a state of great peace...almost monastic. For Gilles & Boissier achieving this apparent simplicity required a respect for the architecture of this old French Basque village. It is true that they are masters of simplicity... such luxurious austerity where the value is in the care with which each finishing is selected.
Photography: Matthieu Salvaign, scanned by me from the AD Spain magazine
Uy no es mi rollo para nada, pero si me la regalaran.....
ReplyDeleteSigh!! it's beautiful!
ReplyDeleteQuizás sustituiría la madera oscura por un blanco decapado, sin embargo tengo la impresión que las fotografías no captan todos los matices que tiene esta vivienda. Me encantaría visitarla…
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